La sostenibilidad corporativa es una necesidad en las empresas de la actualidad, especialmente cuando se trata de la sostenibilidad ambiental. Pero hay grandes interrogantes en términos de cómo las empresas pueden posicionarse para ser innovadores y desarrollar planes estratégicos; así como implementar cambios positivos, enmarcados en un ciclo de mejora continua como es el PHVA, (Planear, Hacer, Verificar, Actuar).
En la última década ha habido un aumento dramático en los ámbitos de la sostenibilidad corporativa y la responsabilidad social corporativa en el mundo occidental. Los gerentes corporativos, las agencias gubernamentales y los reguladores, participan en un debate continuo sobre el tema. Es una curva de aprendizaje en la que muchos están involucrados.
Las pequeñas y medianas empresas (PYME) en particular no han tenido mucho respaldo en términos de atención de investigación; que las ayude a ser más efectivas y eficientes en términos de problemas de sostenibilidad. Y no solo son las empresas europeas las que intentan llegar a un acuerdo con lo que se requiere y lo que se necesita para adoptar el concepto de sostenibilidad empresarial. Es un fenómeno mundial.
Sostenibilidad corporativa: Referencia mundial
En un intento de garantizar que las empresas nacionales e internacionales puedan adaptar estrategias; además administrar las operaciones comerciales para que los productos y servicios sean sostenibles; y con el fin de asegurar que los costos y riesgos se minimicen; RobecoSAM y Dow Jones Sustainability Indices; han introducido un punto de referencia que las empresas pueden utilizar para evaluar su sostenibilidad corporativa.
Los pilares de enfoque se dividen ampliamente en cinco áreas principales:
- Planificación estratégica: los elementos ambientales, económicos y sociales a largo plazo de las estrategias comerciales deben integrarse; mientras se mantienen la competitividad y la estatura de la marca.
- Operación financiera: la empresa debe seguir siendo rentable; por lo tanto, se necesitan retornos financieros sólidos que conduzcan al crecimiento económico a largo plazo.
- Relaciones con los clientes junto con la innovación de productos y servicios: todos estos se basan en la lealtad, que es el resultado de mostrar a los clientes que todas las tecnologías y sistemas son eficientes, efectivos y económicamente viables.
- Gobierno corporativo y participación de los interesados: altos estándares y códigos de conducta impecables son vitales. Los informes públicos también son una parte esencial de la operación.
- Recursos humanos: las capacidades de la fuerza laboral, necesidades y logros de los empleados deben mantenerse a través de un buen sistema de aprendizaje, gestión, remuneración y beneficios.
Esto se considera como un “concepto de inversión” que impulsará el interés y la inversión y; en última instancia, garantizará que la empresa sea sostenible tanto para los inversores como para las empresas involucradas.
Así mismo también es importante resaltar que la sostenibilidad corporativa no se basa únicamente en lo anterior; también hay muchas más áreas en la cuales se debe trabajar y apoyar a las empresas; además de fortalecer y madurar los procesos para que todo el entorno de las compañías sea más efectivo, eficaz, eficiente y por supuesto sostenible, la siguiente imagen destaca los objetivos estratégicos del desarrollo sostenible:
¿Cómo apoya la gestión de Energy Master al cumplimiento de los objetivos?
Para este caso, Energy Master proporciona todo el conocimiento y experiencia en los objetivos del desarrollo sostenible, tales como:
- Energía asequible y no contaminante.
- Industria, innovación e infraestructura.
- Producción y consumos responsables.
Son temas bastantes amplios; sin embargo, el implementar un sistema de gestión de energía y agua, tiene dos impactos principales positivos para las compañías: el primero es ayudar al medio ambiente disminuyendo la huella de carbono; y segundo es el disminuir el costo operativo de las operaciones de las empresas a nivel económico.
Lo anterior lo permite la implementación de un sistema de gestión; el cual puede reflejar a las empresas cifras e indicadores que antes no se tenían, por ejemplo:
- Consumo total de agua y de energía.
- Costo total de agua y energía.
- Consumo de kWh o m3 por unidad producida.
- Indicadores por m2.
- Identificación de sitios de mayor consumo
- Establecimiento de línea base, entre otro.